MIEDOS

Afrontar decisiones que no se deben tomar, aceptar consecuencias por temor a despertar, de este sueño insoportable, pesadilla que castiga, tus más dolorosos sentidos y tu piel estremecida.

No tener armaduras, ni posibilidad de actuar, perdido en el laberinto del que se debe escapar, afrontar las realidades, imponer tu voluntad, ser egoísta no es malo si te intentan humillar.
Nadar a contracorriente pues no hay nada que perder, te lo arrebatan todo y lo debes reponer, no te ahogas en ti mismo, no escondes ganas de ser, te sumergen por segundos, y vuelves a renacer.

La verdad siempre delante, a tu lado te ha de acompañar, en buenos y malos tiempos, fiel siempre te ayudará. Saber de los que te rodeas, pensar que no debes confiar, aunque la voluntad es buena, no todos la saben aceptar.

Mirar al que tienes delante, consecuente el dejarte mirar, y si los que miran no aceptan lo que eres, son ciegos, no saben mirar.

Seguir con firmeza el camino, sin ánimo de entorpecer, pues el de al lado te sirve aunque el otro no lo quiera ver, continuar el vivir de la vida, sin mirarlo con frío desdén, pues ya es complicada sin trampas, y bondad es lo que has de ofrecer.